¿Cómo secar la bicicleta después de la lluvia?

Aunque pareciera que no, es necesario prestar atención cuando la bicicleta está mojada, pues es una buena forma de asegurarse y reducir el mantenimiento a largo plazo, el mismo que podría implicar el reemplazo de piezas que, dependiendo la máquina, podría llevar un alto costo económico. 

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Cuando se hace un viaje bajo la lluvia, es importante reconocer que hay pequeñas partículas de sal, arena y polvo de la carretera que se acumulan en las gotas y estas después se adhieren a la bicicleta tras hacer contacto, lo que ocasiona daños en varias partes y hasta un oxido que con el tiempo se hace difícil de quitar.

Por eso es esencial que siempre que la bicicleta se moje, se pueda secar de forma adecuada, lo más recomendado es: 

1. Secar partes importantes como la cadena, las llantas y los frenos, pero se debe hacer con una toalla diferente y no mezclarlas porque al realizar el secado con una sola en toda la bicicleta, podría frotar la grasa o atraer más suciedad de arena o barro.

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2. Se debe hacer rebotar la bicicleta después de secarla con una toalla; o también podría inclinarse en un ángulo para ayudar con el desplazamiento del agua.

3. Darle una pasada a los discos o a las pastillas de freno con un poco de alcohol, pues este no es grasoso y se evaporará después de deshacerse de cualquier aceite o lubricante sobrante.

Con estos trucos se puede evitar que la maquina se deteriore y que sea necesario reemplazar diferentes partes a corto plazo.