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Yoreli Rincón, la heroína de las Superpoderosas que decapitaba muñecas para jugar al fútbol

Colombia jugará en octavos ante Estados Unidos.

Yoreli Rincón es James Rodríguez y Radamel Falcao García. Es Juan Cuadrado y Jackson Martínez. A sus 21 años, es la figura absoluta de la selección colombiana femenina que, en Canadá-2015, está haciendo historia.

Pero su camino, hasta despuntar en el Mundial de fútbol, ha sido pedregoso. Llegó a tener que caminar seis horas para poder entrenarse, pasó días sin comer y vio cómo todos a su alrededor, incluido su padre, le daban la espalda por querer dedicarse al balompié.

"Ser mujer y jugar al fútbol es un pecado en este país, lastimosamente", afirmó en una entrevista previa al torneo en CaracolTV.

Un "pecado" que cometió desde muy pequeña. Yoreli convertía las cabezas de sus muñecas en pelotas improvisadas porque, aunque su padre poseía una empresa de balones, éstos le estaban prohibidos.

"Yo decía: 'soy un error de Dios, ¿por qué no puedo jugar a esto?'".

Ella se limitaba, desde los cinco años, a coser pelotas de fútbol para ayudar en el negocio familiar pero no podía jugar con ellos.

"Le decía a mi papá: 'pégueme, castígueme, regáñeme' y esperaba a que se fuera para jugar con los balones. Él agarraba un cuchillo y cortaba los balones enfrente mío para que yo me diera cuenta de que no me convenía pero perdió mucha plata porque los balones eran suyos y yo luego agarraba otro diferente", relató.

- Sola a los 12 años -

Originaria de Piedecuesta, un municipio del departamento de Santander, Rincón hizo las maletas con 12 años y abandonó su ciudad con dirección a Tolima. Acababan de rechazarla en su equipo de toda la vida y debía buscar suerte fuera, sola.

Subsistió dando clases de educación física en la calle y nunca dejó de jugar al fútbol, su verdadera pasión. Si había un balón, allí estaba ella, con niños mucho mayores.

"No se creían que fuera una niña. Los papás mandaban a los niños a que me tocaran para ver si era una niña o un niño", dijo.

- Pionera -

Dos años después, por fin, la suerte le dio la cara. Un miembro de la selección colombiana se fijó en ella y se la llevó a Bogotá para jugar en la Sub-20...con 14 años.

Pero en la capital no lo tuvo más fácil. Caminaba seis horas para poder entrenarse y apenas comía pero su sueño seguía siendo lo más importante: quería ser futbolista profesional.

"Muchas veces no comía. Si no tenía dinero para un pasaje mucho menos para un almuerzo", contó.

Pero llegó su momento. En 2012 se convirtió en la primera futbolista profesional de la historia de Colombia al fichar por el Piracicaba de Brasil y, de ahí, al estrellato.

El Piracicaba fue sólo su primera parada. De Brasil a Italia, donde juega ahora, pasando por el Malmö de Suecia, donde ganó una liga y disputó la Champions League.

Las mejores universidades estadounidenses se la rifaron pero declinó sus cantos de sirena.

Hoy es feliz jugando al FIFA en las concentraciones.

Contra Francia, en la segunda jornada del Mundial Canadá-2015, Yoreli Rincón llevó a las Superpoderosas a sumar su primer triunfo en su historia en el campeonato.

Y no uno cualquiera. Batieron al tercer mejor equipo del mundo, dando una lección de juego. Como no podía ser de otra manera, de los botines de Rincón nació el primer tanto del encuentro más importante de Colombia: la 10 agarró el balón y, rodeada de rivales, dibujó un pase imposible a la espalda de la zaga para que Lady Andrade batiera a la arquera gala.

En su segunda participación, la escuadra cafetera avanzó a octavos de final, donde espera la todopoderosa Estados Unidos.

Colombia sabe que lo tiene difícil pero, con Yoreli Rincón en su equipo, nada es imposible.

Mientras, ella, sigue con los pies en el suelo y recuerda que, a pesar de todos sus logros, si se hubiera quedado en su país, "hoy no tendría ni para comprarme una bicicleta".

Su próximo paso, después de Canadá-2015, es tan ambicioso como los anteriores: conseguir que, gracias a su ejemplo, "las niñas jueguen al fútbol y sus padres las apoyen".

Yoreli Rincón futbolista seguirá logrando hitos para las suyas. Yoreli Rincón persona, mientras, continuará derribando todos los muros que se le pongan por delante. Aunque eso suponga volver a decapitar muñecas.

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