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El Tour de Francia y Colombia, cuando el ciclismo destrona al fútbol

La actuación de los escarabajos al rededor del mundo se llevan todas las miradas en algunos momentos del año.

La victoria del antioqueño Rigoberto Urán en la etapa reina del Tour de Francia, el domingo, supuso una nueva alegría que ofreció el ciclismo a Colombia. Era la 16ª victoria parcial del país sudamericano en la prueba más prestigiosa del mundo de este deporte.

Desde Lucho Herrera a Rigoberto Urán y Nairo Quintana, pasando por Fabio Parra, Santiago Botero o Mariana Pajón, el ciclismo ha obtenido unos éxitos que no han logrado otros deportes en Colombia, como el fútbol.

Fabien Ohl, profesor de sociología del deporte en la Universidad de Lausana, explica que la afición por el ciclismo en Colombia tuvo un 'boom' en los años ochenta con ciclistas como Lucho Herrera y Fabio Parra.

"Cuando en los años ochenta, Lucho Herrera ganó entre otras cosas la Vuelta a España y otros ciclistas colombianos obtuvieron buenos resultados, se puede comprender que la población dirigiera su atención a los resultados de estos deportistas que destacaban a nivel mundial", explica Ohl a la AFP. 

"El apoyo político a proyectos de desarrollo del ciclismo se puede comprender en este contexto. Los ciclistas representan de este modo figuras identificatorias muy fuertes en un país golpeado por divisiones y violencia", añade Ohl. 

La mayoría de los ciclistas colombianos vienen de dos regiones, el altiplano cundiboyacense, en el centro del país, de donde viene Nairo Quintana, y la región de Antioquía, de donde es Urán, donde hay lugares donde se alcanzan los 3.000 metros de altura. 

"Más allá del relieve del país, la altitud permite un entrenamiento en hipoxia que facilita después los resultados. Es probablemente la conjunción de factores culturales, sociales y políticos lo que explica el éxito actual. También puede haber acciones individuales, iniciativas locales, unidas a políticas deportivas, como la de la UCI, que busca globalizar este deporte y recibe a ciclistas de América del Sur en el Centro Mundial del Ciclismo en Aigle, en Suiza", analiza el sociólogo suizo.

- El fútbol sigue dominando -

John Alexander Castro, sociólogo especializado en deporte de la Universidad de Colombia, reconoce que el fútbol sigue dominando la cultura deportiva del país.

"En Colombia, como en muchos países, el exceso de información del mundo del fútbol es abrumadora y en ocasiones aterradora. No obstante, la emoción por el ciclismo es un sube y baja pues depende de las victorias, de la emoción del momento que produce la destacada participación del ciclista. Además, emociona ver a ese deportista llevar el símbolo de la colombianidad al podio. Emociona, alegra y otorga una felicidad no esperada, pero sí muy deseada en medio de tantos conflictos internos. Por eso, en distintas oportunidades se les exige más a los deportistas que a los representantes del gobierno ya que, por lo menos, la mayoría de deportistas provienen de extracción popular. Y eso gusta entre los colombianos", explica Castro a la AFP. 

"El ciclismo ya cuenta con una larga tradición en Colombia, que poco a poco se fue desarrollando y ha dado muchos frutos, o mejor, muchas más victorias que el fútbol", añade Castro.

El sociólogo colombiano cree que determinadas condiciones geográficas y sociales han facilitado la aparición de talentos.

"Aunque no tiene el mismo despliegue mediático que el fútbol, el ciclismo se practica en distintas regiones, especialmente montañosas. En un principio puede ser una práctica aficionada por una necesidad. Y si se descubren los talentos, se pueden formar en los equipos de la élite mundial", explica.

"Colombia posee una geografía bastante accidentada. Se le agrega que la infraestructura vial es deficiente y, además, no posee una red ferroviaria moderna. De ese modo, la bicicleta es utilizada como un medio de transporte, especialmente en zonas montañosas. En otras palabras, la mayoría de los ciclistas colombianos se han formado en las carreteras transportándose, sea a su lugar de estudio o trabajo. Muchos de esos ciclistas son aficionados por una necesidad: movilizarse. En ese sentido, se han descubierto talentos en las carreteras colombianas, que se han pulido o han terminado su formación en los grandes equipos", concluye.

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