La plaza de Madrid con un azulejo conmemoró los 43 años del último rabo acortado

El portal Cultoro.com, así cubrió el acto cultural e histórico(Tomado en su integridad):

El acto contó con la presencia del consejero de Presidencia, Justicia y Portavoz del Gobierno regional, Salvador Victoria, en calidad de presidente del Consejo General de Asuntos Taurinos, y diversos miembros del Consejo del Centro de Asuntos Taurinos de la Comunidad de Madrid, quienes acompañaron al diestro homenajeado.

En la sala "Antonio Bienvenida” se recordó la figura de este diestro y su trayectoria profesional y se visionaron unas imágenes que mostraron distintas fases de la tarde del 22 de mayo de 1972, en la que Sebastián Palomo Linares escribió una página importante de la historia de la plaza de toros más importante del orbe taurino: La Monumental de Las Ventas.

Posteriormente, Salvador Victoria, en compañía de Palomo Linares, descubrieron un mosaico en la galería del tendido 1 de la plaza de toros, en el que se refleja el homenaje de la Comunidad de Madrid al diestro de Linares en recuerdo de aquella tarde, última hasta la fecha en que un torero ha recibido el máximo trofeo tras la lidia y muerte de un toro: el corte del rabo.

Biografía

Sebastián Palomo Martínez (Palomo Linares), nació el 27 de abril de 1947 en Linares (Jaén), muy cerca de la plaza de toros donde meses más tarde el toro "Islero”, de la ganadería de Miura, acabaría con la vida de Manuel Rodríguez "Manolete”.

De familia humilde –su padre era minero-, vivió una infancia con muchas carencias, pues era la época de la posguerra, lo que le llevó a trabajar desde muy pequeño como aprendiz de zapatero y acudiendo con tan sólo ocho años a tentaderos y capeas, donde se animó a iniciar el camino en esta difícil profesión.

Como muchos otros jóvenes de su época escogió ser maletilla para buscarse un porvenir, y en este tiempo le apodaban "El Rata” por su vivacidad manifiesta. Después de ir de capea en capea, se presentó en Madrid atraído por la publicidad de la llamada "Oportunidad”, certamen organizado por los la empresa Dominguín y los Hermanos Lozano para captar jóvenes maletillas deseos de ser toreros. Fue seleccionado para intervenir en una de las primeras novilladas y por ello vistió por primera vez de luces el 20 de julio de 1964 en la plaza de toros de Vista Alegre de Madrid, causando una grata impresión por su arrojo y valentía.

Debutó con picadores un año más tarde, el 3 de enero de 1965 en la plaza de toros de Ondara (Alicante), donde corta cuatro orejas en un encierro de Núñez Guerra, alternando junto a Gregorio Tébar "El Inclusero” y Vicente Punzón.

Su alternativa y triunfos

Tomó la alternativa el 19 de mayo de 1966 en la plaza de toros de Valladolid, actuando como padrino Jaime Ostos y como testigo, Juan García "Mondeño”. El toro del doctorado respondía al nombre de "Feíllo”, de pelo negro que pesó 448 kilos y que perteneció a la ganadería de Salustiano Galache, al que Palomo Linares le cortó las dos orejas, igual premio que recibiría tras la muerte del último de la tarde. Esa misma temporada sumó cuarenta y nueve corridas y emprendió su primera campaña en América, continente en el que siempre actuó durante todas las temporadas en que se mantuvo en activo.

Durante varias temporadas Palomo Linares toreó muchas corridas en todas las plazas de España y de América, y durante la temporada de 1969, su apoderado, Eduardo Lozano, junto al de Manuel Benítez "El Cordobés”, Paco Ruiz, llegaron al acuerdo de que los dos diestros torearían siempre juntos durante ese año, manteniendo así la independencia frente a los empresarios que trataron de rebajarles sus honorarios, y a esta temporada se le denominó la de la "guerrilla”.

Restablecida la "paz” en la temporada siguiente, Palomo confirmó la alternativa en Las Ventas, el 19 de mayo de 1970, con Curro Romero como padrino y "Juan José” como testigo. El toro de la ceremonia respondía al nombre de "Presumido”, de 555 kilos de peso, perteneciente a la ganadería de Antonio Pérez Angoso.

A partir de esta fecha, Palomo Linares se situó siempre en los primeros lugares del escalafón, protagonizando el 22 de mayo de 1972, la tarde más célebre de su trayectoria cuando le cortó las dos orejas de su primer toro y las dos y el rabo al toro "Cigarrón” del hierro de Atanasio Fernández. Esa tarde alternó con el diestro Andrés Vázquez y el mexicano Curro Rivera, que también cosecharon un gran éxito. Hacia 33 años que no se cortaba un rabo en las Monumental de Las Ventas, convirtiéndose así en uno de los diez únicos toreros que han logrado este apéndice en la historia del coso venteño. A partir de entonces, Palomo Linares se convirtió en un ídolo de masas y un fenómeno social de la época.

Desde su confirmación, hizo el paseíllo en esta plaza un total de 28 tardes, lidió 56 toros, cortó 15 orejas y salió dos veces por la Puerta Grande a hombros de los aficionados. Estuvo retirado algunos años en los años ochenta y regresó en los primeros años noventa, y en la Plaza de Toros de Las Ventas, Palomo Linares toreó por última vez el 25 de mayo de 1994.

Como curiosidad histórica en su primera época, Palomo siempre vistió de plata y solo en su reaparición utilizó vestidos bordados en oro.

Una vez retirado, se dedicó con éxito a la pintura, actividad artística que le ha reportado una proyección social significativa, habiendo expuesto sus obras en distintas galerías de arte e incluso en la Sala Antonio Bienvenida de la Plaza de Toros de Las Ventas en el año 2012.