Cargando contenido

Mikel Landa, un gregario de lujo que quiere ser líder

El corredor español a sus 27 años, quiere liderar un equipo y luchar por un título en una grande.

Mikel Landa es un gregario de lujo. En los Pirineos mostró que podría optar a la victoria final en el Tour de Francia, pero está obligado a arropar al líder de su equipo, el británico Chris Froome, renunciando a sus posibilidades de lucir el 'maillot' amarillo, cuando está más fuerte que el británico en la montaña.

El ciclista vasco es sexto en la clasificación general, a 1 minuto y 17 segundos de Froome, primero de la carrera.

"Tengo claro que esto no me puede volver a pasar. No volveré a ir de segundo", dijo Landa a la prensa el lunes en la jornada de descanso.

Esta frase deja entrever que Landa no seguirá en Sky la próxima temporada. Una de las opciones que se baraja es que vaya al Movistar, donde ya están Nairo Quintana y Alejandro Valverde.

"No voy a dejar de decir lo de siempre. Es un chaval al que hemos querido tener siempre", afirmó el responsable del equipo Movistar, Eusebio Unzué, este martes en las páginas del diario El País.

"Hemos estado cerca pero él en su momento ha preferido el atractivo de equipos extranjeros, y espero que algún día sea capaz. Me encantaría tenerlo con nosotros. Y todavía no nos ha dicho que en 2018 no estará con nosotros, no. Está claro que posibilidades hay", añade el responsable del equipo español.

Landa prefiere esperar a que termine la temporada. "Todavía no he decidido nada sobre mi futuro. Pronto decidiré", afirmó el ciclista vasco, al que La Gazzetta dello Sport situó el pasado mes de junio en el Movistar el próximo año.

Landa, de 27 años, quiere al menos ganar en un futuro la Vuelta a España o el Giro de Italia, dos carreras que tal vez se adaptan más a sus características.

En el Movistar, con dos líderes como Nairo Quintana y Alejandro Valverde, parece complicado ser la primera opción en el Tour, si al final fichara por el equipo español.

- Trabajar para Froome -

Mientras decide su futuro, en este Tour tiene cortadas las alas y deberá trabajar para Froome.

"La prioridad es Froome. Me cuesta un poco estar retenido porque estoy bastante fuerte. pero sabía a lo que venía, que era para trabajar para él", señaló.

Alberto Contador, segundo español en la general, noveno a más de 5 minutos de Froome, parece querer empujar a Landa a ser más ambicioso.

"No sé cómo lo está viviendo (trabajar para Froome). Tienes que ir tomando las decisiones correctas para los proyectos que te planteas. Tienes que decidir en función de las oportunidades que vas a tener. Vivió esa experiencia (de ser gregario) en Astana (con Fabio Aru y Vincenzo Nibali) y le vuelve a pasar. La vida se centra en decisiones que tengas por tus intereses y la confianza que tengas en ti mismo", afirmó el madrileño el lunes.

En 2015, ya tocó a Landa trabajar para que Fabio Aru ganara el Giro de Italia.

Ayudar a Froome no le impedirá intentar luchar por un puesto en el podio, luchando con Fabio Aru, Romain Bardet, Rigoberto Urán y Daniel Martin, que le preceden en la general.

"Me gustaría ir al podio pero si no perjudica a Froome. Creo que el rival más fuerte es Bardet. Aru y Rigoberto no han estado tan activos, pero a Rigoberto le queda la contrarreloj" de la penúltima jornada en Marsella, de 22,5 km, donde el colombiano aparece como el más fuerte entre los favoritos, detrás de Froome.

El ciclista vasco luchará por el podio del Tour este año, pero la temporada que viene puede convertirse en una amenaza para Froome y Quintana en la ronda francesa.

En esta nota