James y Carlos Queiroz también le enviaron mensajes de apoyo a Casillas

James Rodríguez y Carlos Queiroz se unieron a los mensajes de apoyo al portero Íker Casillas, quien sufrió un infarto agudo del miocardio. Aunque se encuentra estable tuvo que ser intervenido quirúrgicamente en un hospital de Porto. 

Compañero del guardameta en su paso por el Real Madrid, el jugador del Bayern Munich espera que su “amigo” se recupere pronto, más allá de estar fuera de peligro, como lo han indicado los médicos que atienden al arquero de 38 años.  

Mucha fuerza Iker, Recupérate pronto amigo. ???? pic.twitter.com/4V7HMegZVq

— James Rodríguez (@jamesdrodriguez) 1 de mayo de 2019

“Casillas está bien, estable y con el problema del corazón resuelto”, informó el Porto sobre el estado de salud de Casillas, quien llegó al cuadro portugués en 2015. 

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En cuanto a Carlos Queiroz, el mensaje del entrenador de la Selección Colombia fue conciso: “Fuerza Íker Casillas ¡Rápida recuperación!”. Cabe recordar que tanto técnico como guardameta coincidieron en 2004 cuando el portugués dirigió al cuadro blanco. 

Força @IkerCasillas ! Rápida recuperação!

— Carlos Queiroz (@Carlos_Queiroz) 1 de mayo de 2019

Íker Casillas sufrió infarto en el mejor momento que vivía con el Porto 

 Iker Casillas se despidió del resto de temporada tras sufrir un infarto que le sorprendió cuando estaba en estado de gracia y había dejado atrás sus peores momentos en el Oporto, con un inicio complicado, que pudo superar, hasta encontrarse en la actualidad en su mejor momento deportivo, hasta el punto de postularse su nombre para volver a la selección española.

El portero español estaba completando una gran temporada en su cuarto año con la camiseta de los "dragones", en el que sus números, 19 goles en 31 partidos de Liga, le habían colocado entre los mejores guardametas de las Ligas europeas.

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Casillas, que permanece ingresado en el Hospital CUF de Oporto pero se encuentra estable, había dejado atrás los peores momentos sufridos en el club portugués, al que llegó en el verano de 2015 de la mano del entonces técnico de los "dragones", Julen Lopetegui.

Lopetegui apadrinó la llegada de su compatriota al norte de Portugal con un contrato de dos temporadas después de su salida del Real Madrid, del que se despidió después de 25 años y tras una última etapa convulsa.

Su aterrizaje en Portugal, donde se convirtió en el fichaje más mediático hasta la fecha, fue recibido con euforia entre los aficionados del conjunto blanquiazul, que agotaron rápidamente su camiseta en la tienda del equipo.

Sin embargo, a nivel futbolístico, sus inicios no fueron nada fáciles.

La inestabilidad vivida por el club luso derivó en la destitución de Lopetegui en enero, que dejó a Casillas sin la que fue una de las figuras más importantes en su fichaje, aunque se reencontró con un viejo amigo, José Peseiro, que había sido adjunto en de Carlos Queiroz en el banquillo del Real Madrid.