¿Osorio? No, gracias

Candidato natural a dirigir la Selección Colombia, el nombre de Juan Carlos Osorio ha ganado créditos para ser el sucesor de José Pékerman, una vez se confirme que el argentino no seguirá al frente del combinado nacional después de siete años.  

Sumado a la confirmación de no continuar como entrenador de México, las posibilidades de verlo en el banquillo 'cafetero' van en aumento después de haber hecho el curso a nivel de clubes y recientemente, a nivel de selecciones. 

Sin duda un técnico preparado, que busca ser versátil en la cancha y que ha demostrado tener un gran manejo de grupo, esto último, tan importante como su pericia para planificar cada partido. Si no, que lo digan los jugadores mexicanos tras el escándalo que envolvió al 'Tri' semanas antes del Mundial de Rusia. 

Pero hasta ahí. Su 'política' de rotaciones en cada partido, sumado al padrino que lo respalda en la Federación Colombiana de Fútbol para llegar al cargo de seleccionador, son razones suficientes para decirle no a su nombramiento.  

También soberbio, para mi gusto, Osorio no da la impresión de apoyarse en la autocrítica si hay que de darle un giro a sus planteamientos. Rotar por rotar, no; y rotar a nivel de selecciones sí que menos cuando se trata de consolidar una idea de juego ante el poco tiempo de trabajo que hay, una vez se reúnen los jugadores.  

Además, quien lo apoya en el seno del Comité Ejecutivo de la Federación Colombiana de Fútbol, tampoco ayuda, sin entrar en mayores detalles al respecto.  

No obstante, creo que la opción de Juan Carlos Osorio tiene altas posibilidades de concretarse. Si miramos el panorama de los técnicos extranjeros, no muchos candidatos viables aparecen en el horizonte, por no hablar del entorno colombiano. 

En un mercado cerrado y costoso, en muchos casos, el entrenador risaraldense cuenta con todo el camino a su favor para comandar el futuro del combinado nacional.