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Cartagena entre el deseo, la tutela y la prohibición

Otra vez aparecen las posturas absurdas y demagógicas de mandatarios locales que se van por la vía de la prohibición de las corridas como el caso del alcalde encargado de Cartagena de Indias Santiago Londoño Zurek.

Un grupo de aficionados taurinos venezolanos, con experiencia en empresa taurina, desean organizar para el 6 de enero de 2018, una corrida en la que actuarían los diestros el colombiano Juan de Castilla y el venezolano Jesús Enrique Colombo. Por el momento todo está suspendido a la espera de que se resuelva la tutela interpuesta por las instituciones taurinas de Colombia como La Undetoc (agremiación de toreros de Colombia).

Todo el desaguisado lo ha suscitado la manifestación del alcalde de Cartagena Santiago Londoño Zurek, expresó que “mientras sea alcalde de Cartagena, no habrá corridas de toros”, como si para gobernar imperara el criterio personal y dictatorial de lo que quiere y le gusta al alcalde de turno y no el cumplimiento del ordenamiento jurídico y el apego a la Constitución Nacional y el respeto por las tradiciones y la cultura.

La Ley 916 de 2004, es Ley de la República y autoriza la realización de las corridas de toros, lo mismo que varios fallos de la Corte Constitucional que hace jurisprudencia, como quien dice, algunos alcaldes juegan a ser “más papistas que el papa”, incurriendo con esa conducta en atropello y violación al ordenamiento jurídico y constitucional.

El pensado por parte del empresario venezolano, es dar la corrida con seis toreros de distintas nacionalidades, en la que se involucre un colombiano (Juan de Castilla), un venezolano (Jesús Enrique Colombo), un mexicano (Silveti), un español y un peruano.

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